The association of prolonged breastfeeding and allergic disease in poor urban children
C. C. Obihara, B. J. Marais, R. P. Gie, P. Potter, E. D. Bateman, C. J. Lombard, N. Beyers and J. L. L. Kimpen
Eur Respir J 2005; 25: 970-977.
The fact that breastfeeding may protect against allergic disease remains controversial, with hardly any reports from developing countries. This study investigated the association between allergic disease in children and prolonged breastfeeding.
Data were collected from a 15% random sample of households from two poor suburbs of Cape Town, South Africa. Parents completed a validated International Study on Asthma and Allergies in Childhood questionnaire on allergic diseases for children aged 6–14 yrs. Other questions included breastfeeding duration, maternal smoking and parental allergy. Results were adjusted for possible confounders and for possible clustering within the household.
Out of the 861 children included in the study, allergic disease in general, and hay fever in particular, were significantly less frequent in those with prolonged ( 6 months) breastfeeding. There was a significant linear inverse association between breastfeeding duration and allergic disease in children without allergic parents, but not in children with an allergic predisposition.
In conclusion, these results from a developing country suggest a protective effect of prolonged breastfeeding on the development of allergic disease, particularly hay fever, in children born to nonallergic parents. This protective effect was not found in children with an allergic predisposition.
COMENTARIO:
Las enfermedades alérgicas continúan experimentando un notable incremento a nivel mundial, al que no son ajenos los países en vías de desarrollo. La influencia protectora de la lactancia materna sobre este aumento en la prevalencia de enfermedades alérgicas continúa siendo objeto de controversia y los estudios epidemiológicos realizados en este campo han aportado resultados dispares. La conocida hipótesis de la higiene sugiere que una disminución en la exposición a gérmenes durante la infancia conllevaría una reducción en la actividad Th-1, con la consiguiente dominancia en la respuesta Th-2, ligada a la atopia. La leche materna, a través de su alto contenido en oligosacáridos, estimula la colonización intestinal con flora bacteriana específica, como lactobacilos, bifidobacterias y Escherichia coli no patógena. Esta colonización induciría la producción de citoquinas Th-1, que contrarrestaría la actividad Th-2. Además, la lactancia materna evitaría la exposición a antígenos presentes en los alimentos y favorecería la maduración de la barrera mucosa intestinal, confiriendo protección frente a la sensibilización alérgica.
Para valorar la influencia de la duración de la lactancia sobre el desarrollo de enfermedades alérgicas, se ha diseñado este estudio, llevado a cabo en un área socioeconómica pobre de un país en vías desarrollo, donde la presión de estímulos infecciosos es mayor. Se analizaron los datos de más de 800 niños, encontrándose que a mayor duración de la lactancia (más de 6 meses), de forma global disminuía el número de enfermedades alérgicas y en particular de fiebre del heno, reduciéndose también los casos de asma y eccema, aunque sin lograr significación estadística. Es llamativa la observación de que estos efectos sólo se encontraron en niños que no tenían antecedentes de alergia en sus progenitores. En caso de tenerlos, independientemente que fuese en el padre o en la madre, se neutralizaba el efecto protector de la lactancia prolongada, lo que confirma la importancia de la susceptibilidad genética.
Este trabajo vuelve a poner de manifiesto el aumento del riesgo de asma que supone el tabaquismo materno durante el embarazo, independientemente de la exposición posterior del niño al humo del tabaco.
Como crítica, únicamente señalar que el estudio compara los efectos de la lactancia materna prolongada (6-12 meses ó ≥ 12 meses) frente a no prolongada (< 6 meses). Habría sido interesante tener otro grupo constituido por niños alimentados únicamente con lactancia artificial. Desgraciadamente menos del 3% de los casos en esta área cumplían esta condición, lo que impidió el análisis.