Asma y alergia a la aspirina
- Aproximadamente el 10% de los asmáticos pueden empeorar o sufrir crisis de asma tras la ingestión de una aspirina. Los síntomas aparecen aproximadamente al cabo de una hora de la toma y pueden estar precedidos de síntomas digestivos (dolor abdominal).
- Además de la aspirina, esta reacción la pueden producir sus derivados, conocidos genéricamente como antiinflamatorios no esteroideos, en cualquier presentación farmacéutica (pastillas, sobres, supositorios, inyectables…)
- Son fármacos seguros para tratar el dolor, enumerados en función de su potencia (de menos a más): paracetamol con o sin codeína, salsalato, tramadol y derivados opiáceos.
- En general se recomienda no tomar aspirinas a todas las personas con asma, pero en algunos casos se puede autorizar su uso con la connivencia del médico que las recetó y siempre después de avisar de la condición de asmático del paciente.